Sábado 1 de junio de 2019
Cuando no podemos más y todo parece encaminarse hacia un callejón sin salida orar cada día es encontrar la salida como María en el Dios de lo imposible.
No existe ninguna oración que no sea escuchada aunque nosotros no lo percibamos.
La oración es como cuando se tira una piedra hacia el cielo siempre cae. No se queda flotando. Aunque no sepamos donde cayó. Sin lugar a dudas es eficaz. Lo sabemos por la fe de aquél que dijo llamad y se abrirá pedid y encontrareis.
La confianza en su Corazón es la llave que abre la vida a la santidad. Llega un momento en que confiamos o no confiamos y aquí es donde nos lo jugamos todo. Sin confianza descubierta cada día en la oración no llegaremos muy lejos en la santidad. Nos quedaremos en la orilla de los mediocres sin entrar en el mar adentro de la vida en Dios.
+Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria Cáceres