Domingo 2 de junio de 2019
Comenzar orando cada día es empezar bien.Por la mañana me sacaré de tu semblante y al final del día cantaré tus misericordias.
Orar cada día y en el domingo como el día del Señor el descanso del alma y la búsqueda sincera de la voluntad de Dios.
No se ora ni se pide que el Señor cumpla nuestros deseos y proyectos. Se ora para no tener más. Proyectos que el saber y saborear su amor que nos lanza a evangelizar a los que sufren.
+Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria Cáceres