martes, 10 de febrero de 2015

MONTE NEBO

MONTE NEBO






He subido a este monte, donde murió Moisés, aunque nunca se supo dónde estaba su tumba. Se encuentra en Jordania. A lo lejos, en el desierto, se contempla un oasis verde que es Jericó. Desde aquí, el monte Nebo, Moisés contempla la tierra prometida. Es una gozada descubrir que cuando se atraviesa el desierto se llega siempre a la tierra prometida, donde se descubre una “tierra que mana leche y miel”,  se vive en la brisa suave de la fragancia del Evangelio.

+Francisco Cerro Chaves
  Obispo de Coria-Cáceres