En este tiempo de crisis, donde no
todos podrán gozar de las merecidas vacaciones el Señor nos llama y nos invita
a descansar: “Venid a un lugar a descansar”
¿Cómo podemos hoy descansar? El
descanso ¿es un lujo de unos cuantos? La Biblia nos habla de que el descanso
profundo es vivir “como un niño en brazos de su madre” Descanso
es igual a sentirse confiadamente amado. Es cambiar de actividad, es parar el
ritmo frenético que llevamos.
Durante el verano también nuestra
Iglesia Diocesana tiene muchas ofertas para conciliar descanso, espiritualidad
y servicio a los más pobres.
Como un ámbito de descanso
formativo, os ofrezco lo que las parroquias y asociaciones ofrecen a
través de campamentos, albergues y campos de trabajo. Julio y Agosto son meses
de campamentos que tanto bien hace a niños, adolescentes y jóvenes. En nuestra
Diócesis pasan cientos de niños, adolescentes y jóvenes en las instalaciones de
Sierra de Gata.
Agradezco a las parroquias, a sus
sacerdotes y a las asociaciones tan inestimable servicio de descanso, en clave
de disfrutar y aprender.
Para jóvenes, en julio, hay una
peregrinación a Loppiano, Florencia y Roma. Desde la Delegación de
Peregrinaciones y para todos haremos la Ruta de San Pablo e iremos a Roma con
un encuentro con el Papa. A principio de verano la Hospitalidad de Lourdes
peregrinamos con nuestros enfermos a este Santuario de Francia. .
Como propuesta de formación y
espiritualidad tenemos por segundo año “Encontrar la paz
en el sufrimiento” y durante todo el mes de Agosto en nuestro centro de
Espiritualidad Virgen de la Montaña Mes Ignaciano de Ejercicios Espirituales
dirigidos a consagrados y consagradas.
También desde el Apostolado de la
Oración se nos invita a asistir al Cerro de los Ángeles en Madrid para renovar
la Consagración de España al Corazón de Jesús el 21 de junio con una oferta muy
rica, cultural y espiritualmente.
Descansar es invertir para mejor servir.
Descansar no es no hacer nada, pero sí es hacer de otra manera muchas cosas que
durante otro tiempo no podemos practicar con sosiego y tiempo.
La experiencia me da que el mejor
descanso del año, las mejores vacaciones, las más aprovechadas y que mejor me
han hecho han sido las que me han llevado con Jesús a compartir, a no tener,
por unos días, que estar mirando el reloj. Conozco a muchas personas que
después de las vacaciones quedan agotadas ¿Qué les ha faltado a sus
vacaciones? El verdadero descanso que tiene mucho que ver con seguir amando y
sentirnos amados. Orar, vivir más desde dentro, es una clave muy
necesaria, hoy, para descansar. La depresión nos agota, la armonía nos ayuda a
descansar.
Os propongo este Decálogo para
descansar en tiempo de crisis. Es gratuito lo que digo.
1. Proponte leer un buen libro sin
prisas. Leer es aventurar la vida.
2. Dedica todos los día 15 minutos a
reflexionar, a orar Jesús es nuestro gran descanso.
3. Charla sin prisas con los que te
encuentres. Nos agota la prisa
4. Practica deportes sobre todo porque
el esfuerzo moderado nos ayuda al descanso global. Descansar es
también hacer deporte.
5. Contempla la naturaleza. Sorpréndete
ante tanta belleza por la que pasamos sin enterarnos.
6. Haz una excursión con tu
familia y tus amigos y disfruta de los que tienes al lado. Nos descansa el
amor.
7. Escucha música y descubre
matices en lo que escuchas que te sorprenderá Toda belleza verdadera nos
descansa.
8. Haz una visita a quien hace
tiempo tenías que haberte hecho presente No sabes lo que descansa al alma,
la reconciliación.
9. Haz una cura de sueño, no sólo
durmiendo más cantidad sino la calidad de tu descanso. No sabes lo que
descansa la conciencia tranquila.
10. Vive, sin prisas, la celebración de
la misa de cada domingo, de la oración, de todos los momentos celebrativos que
hagas, disfruta sin prisas. Celebra la vida sin prisas.
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Francisco Cerro Chaves
Obispo
de Coria-Cáceres