Lunes 17 de junio de 2019
Orar siempre es conectar con el Corazón de Cristo a través del monte de la transfiguración, donde se repite una y otra vez que bien se está contigo Señor o a traves del valle de Getsemani donde en el huerto de la tentación decimos unay otra vez que el Señor aparte de nosotros la tentación de la desesperación y tristeza.
Orar es siempre vital y la vida se vive desde la realidad de su amor y como peregrinos de la fe. No se ora para no tener problemas, ni tensiones, ni dificultades en la vida, sino para vivirlo todo por Cristo con El y en El.
+Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria Cáceres