Sábado después de ceniza
Orar en la escuela de María
en la cuaresma nos ayuda a vivir interiorizando el misterio central de nuestra
fe, de Cristo muerto y resucitado. Primero nos lanza con María, señora del
silencio a las profundidades del Amor infinito de Dios.
Por otra parte la Virgen
aparece en la cuaresma como seguidora de Cristo, en fe, hasta el final. Nada es
capaz de detener a la mujer que creyó que para Dios nada hay imposible.
† Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres