Martes de la octava de Pascua.
Vivir una vida nueva con el Resucitado exige la cita con la vida cotidiana, con la Galilea de nuestra existencia.
Correr con la Iglesia, con las mujeres, con María Magdalena, con Pedro, con los apóstoles hacia la nueva vida que tiene inicio en Jesús y no tendrá fin.
† Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres