CALLES DE JERUSAJÉN
He
caminado a pié descalzo por tus calles estrechas y a la vez llenas de vida. Te
he visto, Señor, como siempre, caminando al lado de tu pueblo.
He sentido tu presencia en todos, los avatares
de la vida. He contemplado la emoción de que estás Vivo y perdido entre sus
gentes, de una manera anónima como Tú “uno de tantos”.
He
recorrido tus calles, Jerusalén del alma.
+Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres