Señor
Jesús:
esta
noche quiero expresarte,
desde
lo más profundo de mi ser,
mi
amor hacia ti.
Tú
eres el que da sentido a la vida.
Tú
el que sacia mi corazón sediento.
Tú
el que sabes de mis caídas y pecados.
Tú
el que me amas desde siempre.
Señor,
quiero vivir desde tu Corazón,
para
contemplarte en la Eucaristía
y
descubrirte abandonado en los que sufren
y en
los pobres.
No
tengo nada,
solo
Tú eres mi riqueza y mi gozo permanente.
Esta
noche quiero presentarte en mi oración
los
rostros de todos los hombres
para
que derrames en ellos tu misericordia.
Quiero
pedirte por mis padres,
por
mis hermanos, por mis amigos,
por
el que me traicionó.
Quiero
que seas misericordioso conmigo,
que
me des tu Corazón.
Amén.