Un buen libro es siempre un buen amigo.
Lo dejamos y lo tomamos cuando nos interesa Siempre nos conforta. Siempre nos
ayuda. Sin exigir nada, lo tenemos a nuestra disposición.
La historia de nuestra vida está llena
de libros que nos enseñaron y nos enseñan a vivir, a querer, a luchar, a
apostar por la justicia y la paz.
Encontrar un buen libro, es encontrar un
tesoro.
Todos deberíamos escribir un libro
aunque no fuese más que para decir unas palabras: gracias por vivir.