lunes, 23 de octubre de 2017

LUNES, 23-10-2017

Sin oración nos instalamos en la mediocridad


Orar al amanecer es comenzar bien el día. 
Es un brindis a la vida. 
Es abrirse con ojos de asombro a lo que sin lugar nos espera y que vivido desde Dios, no tiene nada que ver con la rutina, sino que es aventurar la vida desde el latido del Amor de Dios. 

Sin oración nos instalamos en la mediocridad y vivimos el tiempo como cronos, es decir como el suceder del tiempo, con Dios es Kairos, es decir la hora de Dios, el acontecimiento de su Amor en cada instante de la vida.

† Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres