1. Ayúdame a ser humano con todo, a no tener una mentalidad
mundana.
2. Hazme fuerte en la esperanza y
comprensivo con lo que no
pueda.
3. Abnegado en la confianza, en la
providencia y prudente en la
sencillez.
4. Ser firmes en lo esencial y abierto en
lo opinable.
5. No ser duro nunca con nadie, pero sí
exigente en el Amor.
6. Creer en cada persona y a la vez
construir desde la realidad de
cada uno.
7. Saber cuál es la meta y respetar los
ritmos de las personas.
8. Ser acogedor en el amor incondicional y
a la vez ayudar a cada
persona a crecer de verdad.
9. Buscador incansable de la verdad y la
justicia, siempre con
caridad y sin ánimo de venganza.
10. Ser ilimitadamente bueno de corazón y a
la vez apostar por la
transparencia de un amor sanador
+Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres