miércoles, 30 de julio de 2014

Decálogo de la felicidad


1. Somos siempre felices en la medida en que siempre amamos.
2. Ser feliz es siempre la aspiración más espontánea del corazón humano.
3. Es verdad lo que decía San Agustín “Nos has hecho, Señor, para Ti, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti”.
4. Sólo en la medida en que hago el “éxodo”, salida de mí mismo, encuentro la tierra prometida de la felicidad.
5. La felicidad acude enseguida donde el Amor se hace realidad.
6. No son más felices los que más tienen, sino los que más se entregan desde el Amor.
7. No se puede ser feliz plenamente sin contar con el Hacedor de mi felicidad.
8. No podemos presentar al Señor como enemigo de la felicidad.
9. Ser feliz debería ir absolutamente unido a ser fiel.
10. Nada llena más el corazón que Dios, que nos hace felices siempre cuando amamos y nos sentimos amados incondicionalmente por Él.