jueves, 27 de febrero de 2014

Corazón de Jesús, cercano a los que sufren



Siempre recuerdo aquellas palabras proféticas del P. Pedro Arrupe, general de la Compañía de Jesús, cuando dijo: “vosotros que decís que habéis aprendido todo de los pobres, de los que sufren, aprended de ellos a querer al Corazón de Jesús”. Los que sufren, cuando viven ese sufrimiento a la luz del Corazón de Cristo, nos evangelizan. Es verdad, el Corazón de Jesús es una espiritualidad para los que sufren, para los pobres.
En el Corazón de Jesús descubrimos que amar y ayudar a los necesitados es camino obligatorio para los que han contemplado al traspasado. Sin una experiencia fuerte de amor a Jesús, es imposible mantener un servicio gratuito a los que sufren. Sin una experiencia de contemplación, también es imposible encontrar el camino hacia el corazón de los que lo pasan mal. Es necesario recorrer el camino de los pobres, si queremos entrar en lo más profundo del Corazón de Jesús.