fidelidad y la felicidad
Cuando un día no entramos en sintonía a través de la oración en el encuentro con el corazón de Cristo nuestra vida pierde el sabor. Es como si los enamorados dejan de encontrarse poco a poco muere la vida compartida.
Sin ese encuentro de amor que es la oración se pierde la vida feliz y fiel, que siempre van tan unidas. No conozco a nadie que sea fiel y que no sea feliz, como tampoco conozco a nadie que sea feliz y no sea fiel. Se necesitan y se complementan la fidelidad y la felicidad.
† Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres