Tiempo para encontrar el latido del Corazón de Dios
Volvemos liturgicamente al tiempo ordinario, donde prevalece el domingo como el día del Señor, la pascua dominical.
Un tiempo para encontrar el latido del Corazón de Dios en los días grises y aburridos.
Saber que la rutina se vence, no con hacer cosas extraordinarias todos los días y estar continuamente cambiando.
Es necesario descubrir que el amor hace todo distinto y hace lo ordinario, extraordinario. El Amor da color y calor a lo de siempre.
Como hay gente que cree vencer la rutina haciendo cosas distintas y raras.
Es necesario descubrir que cuando amamos todo es distinto, aunque sea lo mismo.
El amor es el que hace las cosas no tengan fecha de caducidad.
† Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres