EN PLENO CALOR DEL DÍA
He terminado de comer y me he retirado a leer y
descansar. Todo invita a la siesta. El descanso aparece como una brisa suave en
el fragor del día.
En medio de todas estas
dificultades del calor insoportable me siento feliz. Acudo al Señor y
experimento, como siempre, el descubrimiento del Amor del Señor en medio del
calor del día.
† Francisco Cerro Chaves
Obispo de Coria-Cáceres